La infalibilidad
27/09
Vivimos en un mundo lleno de fallas, y a diario tratamos con personas que prometen y nunca cumplen, que dicen mas no hacen. Buscamos la perfección y que no nos fallen, pero lo cierto es que ni aún en nosotros encontramos tales virtudes.
¿son los hombres falibles? Sí, sin excepción. Sólo Dios es infalible.
¿Fue san Pedro infalible? “No”, Pablo dice: “Empero viniendo Pedro a Antioquía, le resistí en la cara, porque era de condenar. Pues antes de que viniesen algunos de parte de Jacobo, comía con los gentiles; pero después que vinieron, se retraía y se apartaba, porque tenía miedo de los de la circuncisión… pero cuando vi que no andaban rectamente conforme a la verdad del evangelio, dije a Pedro delante de todos: si tu siendo judío, vives como los gentiles y no como judío, ¿por qué obligas a los gentiles a judaizar? (Gálatas. 2:11-14)
¿Declara la palabra de Dios que todos los hombres yerran? Esto es lo que dice la palabra de Dios: “sea Dios verdadero, mas todo hombre mentiroso” (Romanos 3:4) “Todos se apartaron a una fueron hecho inútiles; no hay quien haga lo bueno, no hay ni aun uno” (romanos 3:12) “Todos ofendemos en muchas cosas” (Santiago 3:2)
La Palabra de Dios es infalible, la palabra de los hombres no; Dios es infalible, el hombre por lo contrario siempre falla. La Biblia es perfecta, útil para redargüir, enseñar, aconsejar, guiar y exhortar. Fue escrita por diferentes hombres que vivieron en diferentes lugares y diferentes épocas y aún en ella no se encontraron jamás contradicciones sino por el contrario, el fiel cumplimiento de todos los hechos y promesas que en ella están escritos. Busca fallas, todos las tenemos y están en todas partes y todas las cosas tienen sus fallas o defectos. Pon tus ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el que fue fiel a su Padre y a todo lo que él le dijo. El no te fallará jamás, no te dejará ni te desamparará aunque tu le dejes y le falles; y todo lo que te ha prometido lo cumplirá, porque no es hombre para que mienta ni hijo de hombre para que se arrepienta, él lo dijo y lo hará, lo habló y lo ejecutará. (Número 23:19)