02/08

 

En el libro de Proverbios 12:15,16 leemos: “El camino del necio es derecho en su opinión; mas el que obedece al consejo es sabio. El necio al punto da a conocer su ira; mas el que no hace caso de la injuria es prudente.” Dijo una vez Sócrates: Si un burro pateara, ¿Acaso lo demandaría? Con esta sencilla frase, Sócrates enseñaba una de las lecciones mas poderosas de la vida. No se trata de ganar cada discusión, ni de demostrar superioridad ante quienes no desean aprender. Sino elegir con sabiduría cuáles batallas merecen nuestra energía. Muchas personas reaccionan ante los insultos y la ofensas como si su dignidad dependiera de ello. Pero en realidad, el verdadero poder está en mantener la calma y la dignidad incluso cuando te provocan. Cuando un burro patea, actúa desde su instinto y su naturaleza, no tiene conciencia de lo que hace. De la misma manera, hay personas que, movidas por la ignorancia, y la envidia y de su propio fracaso y sufrimiento solo saben atacar y gritar. La ignorancia grita, la sabiduría calla; tal como leímos en proverbios: el necio da a conocer su ira, mas el sabio no hace caso de la injuria, es prudente. El que sabe quien es y cuánto vale, no necesita defender su ego en cada ofensa que recibe. La respuesta que mas incomoda al ignorante es el silencio. Sócrates entendía que la vida es demasiado breve como para malgastarla en discusiones con quienes no quieren aprender y solo saben pelear.  No te rebajes al nivel de quien solo busca conflicto, la verdadera inteligencia no necesita imponerse. Es mejor retirarse en paz que quedarse atrapado en un pantano de palabras vacías; recuerda siempre que: Cuando el burro patea, el sabio calla.

Ver todas